Vitoria-Gasteiz alberga la última población de grajilla occidental de la Comunidad Autónoma, según el Atlas Ornitológico de Euskadi, elaborado por la Sociedad de Ciencias Aranzadi.
El censo de la población reproductora de grajillas de Vitoria-Gasteiz se realizará por iniciativa de la asociación Txepetxa, contará con la financiación del Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz y de Electra Vitoria Orona y la colaboración de la Fundación Catedral Santa María. También se hace un llamamiento a la participación ciudadana para que el esfuerzo tenga el mayor éxito posible (leer más abajo en apartado de "participación ciudadana").
Más de uno se habrá dado cuenta de que, en sus paseos por Vitoria, es frecuente ver córvidos que se mueven en parejas o grupos pequeños entre los tejados y fachadas de nuestros edificios, ocasionalmente en grupos ruidosos. Muchos pensarán que pueden ser cuervos o cornejas. ¡Pero no es así! Aunque ocasionalmente estas dos especies de córvidos se pueden observar en el casco urbano de Vitoria-Gasteiz, las que normalmente vemos son grajillas occidentales (Coloeus monedula para los científicos), que es la especie de córvido más común en las zonas urbanas después de las muy ubicuas y blanquinegras urracas. Las grajillas no son completamente negras, puesto que intercalan tonalidades negras con grises ceniza, sobre todo en la zona de la cabeza y cuello. El iris del ojo es también notoriamente gris claro, que contrasta con los ojos típicamente oscuros de otros córvidos.
Nidifica habitualmente en edificios, roquedos y huecos de árboles. De hecho, la disponibilidad de huecos adecuados para la nidificación es uno de los factores más importantes para la presencia de las poblaciones reproductoras. Se trata de una especie muy gregaria. En invierno son frecuentes las grandes agrupaciones en dormideros. En el dormidero principal de Vitoria, localizado en la calle Pintor Teodoro Dublang, se contabilizaron tan solo 66 ejemplares en el último censo nacional llevado a cabo en diciembre de 2021. Cuando llega la época reproductora, las parejas se van repartiendo por la ciudad, aunque pueden también crear colonias en función de la disponibilidad de cavidades y su localización.
Al igual que el resto de los córvidos, las grajillas son omnívoras, pudiendo explotar fuentes de alimento de origen humano y alimentarse incluso de pequeños vertebrados. Sin embargo, suelen tener mayor tendencia a aprovechar alimentos de origen vegetal. Los insectos de mediano y gran tamaño suelen ser otra de sus preferencias alimentarias, sobre todo en la época reproductora cuando deben proporcionar a sus pollos alimentos con un alto contenido en proteínas. A la hora de buscar estos alimentos suelen recurrir a zonas abiertas a caballo entre áreas naturales y agropecuarias, con presencia de herbazales, matorrales, cultivos, explotaciones ganaderas extensivas y bosques adehesados. Por tanto, la presencia de hábitats naturales abiertos y que combinan la agricultura tradicional puede ser otro factor que condicione la supervivencia de esta especie.
La población de grajillas ha sufrido un fuerte declive en nuestro entorno. En los censos realizados en los años 80 se citaba como reproductora habitual en muchas zonas rocosas y pueblos del territorio. Lamentablemente, en los últimos años, la población vasca de la especie ha sufrido un drástico declive hasta el punto de que la ciudad de Vitoria-Gasteiz constituye el último reducto de la especie en la CAPV (según Atlas Ornitológico de Euskadi elaborado por Aranzadi y el de España de SEO/Birdlife). Entre las causas más probables del deterioro de sus poblaciones se encuentra la intensificación agrícola, lo que ha podido reducir la disponibilidad de sus alimentos naturales preferidos (semillas de plantas silvestres e invertebrados), así como aumentar las probabilidades de intoxicación por contaminantes fitosanitarios. En menor medida, el hecho de que siga siendo considerada especie cinegética en muchas regiones (en Álava dejo de serlo en julio de 2016) y la tendencia urbanística a la reducción del número de huecos en edificios donde pueden reproducirse, han podido contribuir de manera secundaria a agravar la situación de la especie. Así las cosas, el establecimiento de medidas de protección para las grajillas resulta imprescindible si no queremos que desaparezcan definitivamente de nuestro paisaje. Para ello es imprescindible conocer, en primer lugar, la población con la que contamos, su estado de conservación y las necesidades ecológicas que la especie tiene en nuestro entorno.PARTICIPACIÓN CIUDADANA
Es por ello que se hace un llamamiento para que todas las personas que realicen cualquier observación de grajillas en Vitoria y sus alrededores durante el próximo año (desde el 1 de mayo de 2023 y el 31 de mayo de 2024) las comuniquen a la asociación Txepetxa a través de los medios indicados más abajo. De particular interés son aquellas observaciones que sugieran la existencia de un nido. Algunos de los comportamientos que pueden evidenciar una localización de reproducción son las entradas y salidas frecuentes a una cavidad, la presencia de parejas posadas juntas en zonas adecuadas para nidificación, transporte por los individuos de material para construcción del nido o alimentos, comportamientos nupciales o cópulas. Para contactar con Txepetxa se pueden usar los siguientes medios:
- · txepetxateam@gmail.com
- Twiter: @Txepetxa_org
- Instagram: @txepetxaring
También se pueden aportar citas mediante plataformas y apps específicas, para la recolección de datos de biodiversidad:
- www.ornitho.eus
- eBird
A la hora de comunicar una observación, es importante indicar, al menos, la siguiente información:
- Fecha
- Hora
- Coordenadas más precisas posibles donde se produjo la observación de las aves
- Número de grajillas observadas
- Descripción de la actividad que estaban realizando de las aves (por ejemplo, si estaban posadas en el punto de la observación o estaban en vuelo en dirección a otro lugar, si se observó alguno de los comportamientos reproductores indicados más arriba)
- Mandar descripción y foto (opcional) de las cavidades que pudieran contener un nido.
- Observador.
La información que se reciba ayudará a complementar la recogida sistemática de datos que realizarán los miembros de Txepetxa, sobre todo en lo que se refiere al uso del municipio por la especie y a la localización de nidos dispersos y difíciles de detectar a pie de calle.
Por último, decir que, en una segunda fase del proyecto, se abordará el estudio del uso del espacio de las grajillas en la ciudad de Vitoria-Gasteiz y su entorno para tratar de identificar sus áreas preferidas de alimentación y descanso a lo largo del año. Para ello, se plantea colocar emisores de seguimiento remoto en varios ejemplares. De esta forma, se ampliará significativamente la información disponible sobre el comportamiento de la especie dentro del municipio, lo que nos permitirá en un futuro identificar, proteger y gestionar áreas críticas para la especie.Al fin y al cabo, parece que el destino de las grajillas lleva ligado a Vitoria-Gasteiz desde hace muchos años, no en vano unos córvidos aparecen flanqueando el castillo en el escudo de nuestra ciudad.
Teléfono de contacto: 635707669
Blanco, G., Domínguez, L., Fernández, L., Martínez, F., González del Barrio, J. L., Frías, Ó., Cuevas, J.A. & Carrete, M. 2022. The decline of common birds exemplified by the Western Jackdaw warns on strong environmental degradation. Conservation, 2(1), 80-96.
Fotografías: Ivan de la Hera, Jordi Gómez, Pako Zufiaur